A veces uno siente simplemente el impulso de escribir y ya; una fuerza poderosa, una corriente de agua (¿o un viento patagónico?) que lo lleva por delante, lo atropella. Y si bien nunca se tiene muy claro qué terminará diciendo, a veces sabe sobre qué va a hablar.
No es ese el caso hoy. Se entrecruzan, se mezclan, se arremolinan sentimientos y pensamientos, intuiciones; visiones del pasado y del futuro, muertes y nacimientos; pero, paradójicamente, de todo este caos surge un sólo punto de certidumbre: el de haber cruzado un umbral en la historia a partir del cual nada será como lo fuera, porque algo nuevo está naciendo. Porque muerte y vida son dos caras de la misma moneda.
La muerte de Néstor Kirchner irrumpió en nuestras vidas, pateando todos los tableros, reconfigurando todo a su alrededor de manera dramática, del mismo modo en que había llegado; hasta en eso fue coherente.
Durante estos días, en las largas horas de estar en la Plaza y en la fila para la despedida, me preguntaba porqué estaríamos ahí cada uno de nosotros; cuál era el motivo singular, la cuerda íntima tocada para que nos encontráramos allí toda la maravillosa y heterogénea multitud que conformábamos; si el motivo que había impulsado al profesional de buen pasar económico era el mismo de la mamá que percibe la AUH; o si lo que convocaba a la gente anciana que estuvo allí increíblemente en pie a lo largo de las horas era compartido por las oleadas de pibes y pibas, jóvenes, vitales, deseosos de construír su futuro.
Se lloraba, se cantaba, se compartía con el ocasional compañero de al lado, con el que el destino había juntado en un tiempo, un espacio y un ideal. Había una ceremonia pagana, un conjuro de la tristeza, sí, pero sin angustia. No es un dato menor: había una gran tristeza, una pena enorme, pero a la vez una gran serenidad, en todo caso, un triste compartir.
No puedo evitar recordar un momento del Bicentenario: en la medianoche del 24 de Mayo, cantando el Himno junto a millones, donde escribíamos que lo que se jugaba era, ni más ni menos que la Constitución del Nosotros; me pregunto si no estaremos ante una profundización de ese "Nosotros", emergiendo como el acto fundacional de una nueva etapa, del resurgimiento de una fuerte corriente de pensamiento y sentimiento nacional y popular, libertaria e incluyente, allí donde antes había sólo dudas .
"Gracias, Néstor. Fuerza, Cristina" , es el grito de batalla, la imbricación de lo que ya se ha hecho con lo que aún está pendiente de hacerse; es, también, la letra del compromiso que, en tanto pueblo, asumimos: seguí esta línea, te acompañamos.
Ahora bien, ¿habrá alguna razón fundamental, que se destaque nítidamente sobre las demás, que haya originado esto ? Seguramente, cada uno de nosotros tendrá la suya; en lo personal, creo que Néstor Kirchner volvió a unir política con pueblo mediante la Dignificación: si la política vuelve a tener sentido, retorna como rectora de los destinos de un pueblo, es porque lo hace atendiendo los intereses de las masas populares, en particular, de las más desprotegidas. La política deja de ser instrumento de dominación económica y social para transformarse en la herramienta de cambio. Esto, en sí, en la Argentina del siglo XXI, es una verdadera revolución, diríamos, la matriz revolucionaria: ampliando el espectro comunicacional, lo que redundará en mayor pluralismo; volviendo a otorgarle al Estado un rol fundamental en el equilibramiento de la economía; promoviendo la industrialización en general, recuperando fábricas; la AUH a la vez que ayuda económica importante para los más desprotegidos, provee educación; la promoción del empleo de toda manera posible; la posibilidad que los trabajadores discutan salarios mediante paritarias; el rescate del sistema previsional y la lenta pero persistente recuperación de los haberes jubilatorios; la ampliación de derechos de las minorías, como lo ha representado la Ley de matrimonio Igualitario; y batallas aún por darse, como la discusión sobre el Aborto, porque el estado no puede desatender el hecho ya existente que éste se produce clandestinamente, pero que las mujeres pobres lo efectúan en condiciones que suelen desembocar en su muerte. ¿Alguien puede pensar en que estas conquistas son fácilmente desmontables ? Si bien una parte de la población tiene un acendrado componente reaccionario, hay desatado en la sociedad un impulso a más, a mejor, que no será fácilmente detenible por quienes tiran para atrás.
La muerte. Jodido tema para meterse. A nivel del Inconsciente, el freudiano, no hay representación en el Inconsciente; traduzco: no hay palabras que recubran eso llamado muerte.
Si toda muerte es, a su modo, un mundo que se derrumba, ésta, nuestra magna muerte, reconfigura el campo en cuestión, porque ha hecho del Pueblo, Acto.
No puedo dejar de emplear este "reconfigura", es lo que insiste y en su insistencia repite, pero repite en diferencia, porque justamente todo va mutando: el traidor es más visible en su traición, porque destaca, contrasta demasiado con la extraordinaria muestra de gratitud y lealtad colectivas. La impotencia de los charlatanes de la politiquería, sus discursos de ocasión, mediocres, grises, naufragan frente a la simple contundencia del acto popular; la fabricación perversa del sentido común se va a pique, porque queda desnudo el odio que lo sustenta, mientras sus pantallas no pueden ocultar el amor de millones.
Allí donde la idea neoliberal creaba clientes, consumidores, competidores, instalaba individualismo, desconfianza, lucro, cálculo. Lógica de mercaderes, el fin supremo no se extiende más allá de la propia familia. La libertad, tan bastardeada, se reduce al derecho de propiedad. Privada, claro. Si la libertad es "del individuo" y la propiedad "es privada"; si la sociedad se reduce a un ámbito de competencia individual, con ganadores y perdedores; si el pensamiento se vuelve el eco de la voz del otro, no hay proyecto común posible, no hay destino común posible. Es éste el verdadero lugar de la Angustia: la posición de la mosca atrapada en la telaraña.
Hacía falta un nuevo acto para salir de este lugar de la angustia, de la telaraña del pensamiento único. Esta es la novedad que viene a introducir el kirchnerismo: a fuerza de hechos, de actos, de restitución de dignidades, va haciendo que lo invidividual vacile, que el otro comience a tener otra existencia. Es eso, entre otras cosas, lo que encierra ese "Gracias, Néstor. Fuerza, Cristina" . Esta corriente de pueblo es la que se constituye en acto; es el pueblo hecho cuerpo el que abarrota la Plaza de la historia. El Pueblo en Acto es de la misma madera que el que en el 45 rescató a un hombre para convertirlo en su líder.
Ese ganar la calle sin otra convocatoria que el compromiso que se decide asumir; ese poder verse reflejado en las lágrimas del otro que se convierte en un semejante, ya de por sí constituyen una dolorosa derrota para la antipolítica: donde nos quieren temerosos, "adaptados", discriminando al de tez más oscura, con su billetera más vacía y su vocabulario más limitado, separados, en cambio, nos encuentran en pleno acto, resignificando la toma de ciertas banderas nacionales que habíamos comenzado a vislumbrar en el Bicentenario: ya habíamos comenzado a entender que había que volver a constituír ese "Nosotros", ahora, estamos aprendiendo a darle su contenido: inclusión, dignidad, justicia.
Y en eso estamos, muchos de nosotros, reaprendiendo a ser pueblo.
Hasta la Victoria, Siempre.
34 comentarios:
Sujeto:
Qué buena reflexión.
Lo que repite es diferencia, por supuesto. El maestro Deleuze lo mostraba...
Qué patéticos los intentos reduccionistas de la reacción, ese espanto ante esta verdadera reconfiguración del panorama, de todas/os nosotras/os, desde el pasado miércoles! Y qué maravilloso, aún con todo el dolor que estamos procesando todavía, el percibir este compromiso colectivo, tan amplio, no sé si tan inesperado -nunca sabemos cuánto, cómo se va expresando la mutación "social" porque no tenemos perspectiva externa- pero sí fortísimo. Definitivo. No hay manera de volver de ciertas experiencias, la historia del peronismo nos lo enseña. No hay forma de volver cuando te has sentido dignificado/a, interpelado/a, visibilizado/a, por primera vez.
Un abrazo!!!
Yo el miercoles en la tarde cuando aun estaba vigente el censo , cuando uno queria salir de su casa , que el censo se hiciera otro dia u otro año porque parecia tan poco importante en ese momento , y antes de la convocatoria que se daba para encontrarnos todos a las 8 , yo vi ahi muchos grupos sentados en la plaza y vi miedo , miedo por el futuro , por haber perdido alguien que uno tal vez inconcientemente consideraba su padre politico . Y miedo por nuestra nefasta historia previa , porque supongo que hasta los mas pendejos tienen conciecia de lo que vivimos todos en 2001 . Ahora bien que eso no sea facilmente desmontable va a dependerenteramente de nosotros , sino fijate Rajoy que en España amenaza retrotraer los derechos que se ganaron ultimamente en las pocas batallas en als que nos podemos identificar con Zapatero hoy . Creo que si todos no nos ponemos las pilas para ayudar a Cristina a seguir profundizando esta al cecho lo peor de la patria corporativa que esta dispueta a traer la paz y el consenso de las sociedades perecidas y en decadencia como USA
Un abrazo
Hola Daniela
Muchas Gracias por tus palabras.
Creo firmemente que hay un re-aprehender colectivo, masivo, una reconstrucción de lo nacional y popular que es muy promisoria para el destino de nuestro pueblo.
Saludos
Javier:
Concuerdo plenamente con vos en que no perder estas conquistas va a depender de nosotros. Indudablemente, no bien pueda, el establishment va a saltar apuntando a la yugular; pero justamente por eso me tranquiliza pensar en esto que veo emerger como una toma de conciencia cada vez más expandida, más extensa. Éste es nuestro único seguro.
Fijate los casos que mencionás de España; me pregunto, ¿Cúanto hace que la izquierda española (y europea en general) es demasiado parecida a la derecha ? No soy muy ducho en estas cuestiones europeas, pero quizá también haya que buscar por ahí ese posible "retroceso".
Como de costumbre, muy agradecido de tu siempre presente lectura.
Un Abrazo
Sujeto querido, qué buena nota hermano.
Sabés, en estos días me estuve preguntando todo el tiempo por qué me quebró tanto la muerte de NK. Tengo la idea de que me estoy refundando, no es de ahora, hace unos años que la potencia de la realidad me hace replantearme cosas, a darle más valor a pensar desde el corazón además de la mente. Pero creo que cuando sea capaz de responderme porqué estoy tan en carne viva en estos días, nacerá un nuevo Rafa. Quizá también en eso andemos muchos de nosotros.
Ahora, lo del nosotros y el ellos, no estoy muy seguro de que tengamos que plantearlo en esos términos. Finalmente hablamos de reconstruir un país a partir de una idea, una idea que está viva, y creo que hoy está más viva que nunca. Y quizá, si reducimos la idea al nosotros y al ellos, nos reducimos. Creo que los términos deben ser, nuestras ideas, sus ideas. Porque hay muchos, pero muchos, que sé que comparten nuestras ideas, pero su mezquindad les impide abrir sus corazones.
Un abrazo pibe,
Hola Rafa
Me alegro te haya gustado lo que leíste. Yo también estuve muy triste, muy emotivo con todo esto; y durante días no podía articular muchas palabras en relación a esto. Creo que me ayudó mucho el poder estar en la Plaza, en las interminables filas del velatorio, respirando todo el aire fresco que había, y que ni la tristeza lograba opacar.
Estoy recordando una frase setentista: "la sangre derramada no será negociada". Bien podríamos decir, ahora, "las lágrimas derramadas no serán negociadas"...
En relación al "nosotros y ellos", fijate que no hago hincapie en la dicotomía; enfoco el "nosotros" del mismo modo que en el Bicentenario: como un despertar de algo dormido, la reafirmación de una pertenencia, la creación de algo que sea "otra cosa": terminar de derribar el paradigma del "sálvese quien pueda" individualista, mezquino. Quizá no fui muy claro en su planteo, pero apuntaba para ese lado.
Rafa, desde ya, muy agradecido por tus siempre amables palabras.
Te mando el abrazo de siempre
Hola Sujeto, con mis 58 pirulos sobre la espalda y mucha cosa por decir por lo vivido y por lo sufrido, no me avergüenza decir que
lloré, lloré no solo por un ser extraordinario que me devolvió la
ilusión de creer que se puede, sino también porque me abracé a otros
como yo que no podian entender lo que sucedía, miles de hombres, mujeres, niños con sus padres en una fila inmensa esperando agradecer, cada uno algo distinto pero en su conjunto todo era lo
mismo sin odios ni resentimientos. En el dolor había cierta paz
como en un enorme abrazo arropando nuestros corazones, y no pensamos en los que escondidos gozaban o reian por la partida de
un líder que jamá podrán tener, porque no nos importan las mentiras
estaba todo tan claro, tan claro como todo lo que se logró y se
seguirá logrando con éste modelo de país que la mayoría desea.
Un gran abrazo.
Hola Roberto
Leete: "en el dolor había cierta paz como un enorme abrazo arropando nuestros corazones". Dificilmente pueda decirse mejor lo que se sentía ahí, en ese momento. Yo no tengo dudas que se han entramado ciertos lazos que habíamos comenzado a ver en ocasión del Bicentenario, convicciones de destino común, de camino recorrido y por recorrer. Lo veo como un viraje importante en la conciencia de mucha gente.
Te agradezco pasaras por acá y dejaras tu comentario.
Un Abrazo
Al día siguiente yo escribía que Kirchner nos había devuelto la esperanza. Pero se trataba de una visión sesgada, personal, la mía. Lo que pudimos ver en esos días en esa Plaza fueron agradecimientos de gente que había recuperado algo más que la esperanza.
Kirchner nos dió muchas cosas, entre ellas, poder reconocernos nuevamente como pueblo. Volver a sentir orgullo de pertencer a este, nuestro país, en nuestra casa, esta Latinoamérica.
Pudimos volver a sentirnos orgulloso de nuestro Presidente, luego de tantos presidentes (con minúscula) que nos avergonzaron.
Esperaba tu palabra enredada.
Un abrazo de este compañero de ruta.
Compañero Ricardo,
Me costó realmente mucho sentarme y poder articular algo más allá del compartir el dolor, la conmoción, la tristeza. En la Plaza, pero también en la calle, uno pudo comenzar a percibir que había un más allá. Pequeña anécdota: el sábado volvía de Carta Abierta (por favor, no dejes de ver en Youtube, en laspatasenlafuente, la intervención de Ricardo Forster, y sobre todo, el final), me bajo del colectivo y veo en una casa muy paqueta, un dúplex muy caro, una gran bandera argentina, con una tira negra de tela cosida de apuro. Sigo caminando, sin dejar de mirarla, y en eso me cruzo a una señora mayor, desconocida, que me sonríe y me dice, "¿Vió qué lindo, señor?", a lo que le respondí, "hermoso y triste señora", y cada quien siguió su camino. Esta señora y yo seguramente en la vida habríamos cruzado una palabra, si en nuestro cruce de caminos no hubiera estado esa bandera enlutada. Creo que esta breve anécdota es un poco metáfora que habla de esos hilos invisibles que comienzan a unir a mucha gente.
Como siempre, la gran alegría de contar con tus palabras.
Ya sabés el abrazo que te mando
La señora y vos se "enredaron" porque hubo un hilo conductor, Sujeto. Es tal vez el mismo hilo que nos está sacando del anonimato, de la soledad individualista, del sálveses quien pueda. Es el hilo que nos junta con el prójimo-próximo. Me costó mucho encarar el teclado y sacarme la bronca, ese no tenías derecho a irte justo ahora, Flaco! Pero lo hice. Y fue catártico. Liberador. Y sabés qué similitud encontré?: los paraguas! 1810,2010: Plaza, pueblada, nacimiento, paraguas... Estamos pariendo una historia nueva y lo hacemos entre todos. Pero el duelo tendrá que ser corto: la caranchada está lista para atacar y no debemos, no podemos ni queremos retroceder. Y esa Flaca puro corazón, ovarios, neuronas a full, hecha un puzzle pero más entera que todos nosotros juntos...esa Cris necesita aguante y apoyo e ideas y compromiso.
Hasta la "V", Sujeto.
Hola Chela
Me quedé pensando en la similitud que encontraste: el paraguas, que es lo que nos cobija ante una lluvia, como si fuera un escudo protector. (también, vicios de psicoanalista: el paraguas era el símbolo de un villano de Batman: el pingüino...).
Néstor Kirchner realmente nos proveyó de un paraguas para que podamos protegernos, ¿No te parece ?
Muy agradecido de haber contado con tu lectura y tus comentarios.
Hasta la "V", nomás.
Sujeto,
¡Gracias por tus palabras que me desenredan las ideas!
Cada vez suena mejor: "nosotros" "lo nuestro" "inclusión, dignidad, justicia".. el amor es la conciencia de unidad con todo lo que existe, es nuestras materia prima por eso el nombre de mi blog es "Mi Tucumán... Nuestro Tucumán" (que todavía es apenas la primera pincelada de lo que me gustaría pintar)
Un abrazo
contundente compañero. Gracias por sus palabras. Hubo un hilo conductor entre ambas movilizaciones, claro que sí.
Hola Mi Tucumán
Lo lindo es que suena mejor, y además, más fuerte.
Siga pintando, maestro. Te mando un Abrazo
Coincidimos, Sujeto, en afianzarnos en el nosotros. Harto de que me increpen por "esta mujer" o "aquel hombre". Vamos hacia ahondar en un construcción colectivo, que de seguir en este paso, en unos años será más evidente.
Hola Manuel,
Me alegro que vos también compartas la idea de ese hilo conductor.
Aprovecho para mandarte un fuerte abrazo de compañero.
Hola Unfor
Es así como lo planteás, nomás. Y creo que tanto pibe en la plaza,no sólo es la grata sorpresa del presente, sino la alegría de ver que hay también muchos dispuestos a retomar la posta.
Un Abrazo
Excelente tu posteo, Sujeto, claro y detallado. Específico. Muy adecuado, muy reflexivo.
Me quedé con la frase:
"Néstor Kirchner volvió a unir política con pueblo mediante la Dignificación: si la política vuelve a tener sentido, retorna como rectora de los destinos de un pueblo..."
Atendió a los intereses de las masas populares, todas. Las más desprotegidas mucho, pero al resto, también. Y eso se vió reflejado el miércoles. Mucha gente, que no es pobre de solemnidad, está y estuvo mucho mejor desde el 2003 para acá, en montones de factores. Es innegable.
Sobre Europa (España, Italia, Francia): los más pobres, los más desamparados, los obreros -la mayoría- hoy son extranjeros, sean latinoamericanos o de Europa del este. Prefieren políticas de derecha los votantes. O candidatos que se dicen de izquierda, pero son de derecha al momento de actuar. De la mano del bienestar, viene la derecha. El pequebu cuando tiene casa, pan y trabajo, empieza a joder al de abajo, decía un amigo. Y es cierto, para mí.
Ricardo dice: "fueron agradecimientos de gente que había recuperado algo más que la esperanza". Adhiero plenamente. Y también adhiero al "Esperaba tu palabra enredada".
Abrazo
Hola Almita
Muchas, muchas gracias por tus palabras.
Leyendo lo que escribiste, pensaba en el delirio que tiraron hace poco, ya ni recuerdo cuál de los monigotes impresentables de la oposición (creo que Sanz): que el peronismo, y en particular, el kirchnerismo, fabrica pobres para tener poder clientelar...
Los resultados deben estar a la vista, ¿No?
Saludos cordiales
Qué aristas interesantes, descubro en tus palabras. Fijate, sujeto, que hablás de esperanza, claro, pero también también del fracaso de la antipolítica. Acá se puso en acto el reconocernos argentinos, más allá de la tez, el vocabulario o la billetera.En su post, Udi habla de llorar "como un cabecita negra" Es eso,nosotros, lloramos por amor, tenemos un ideal, visualisamos los caminos, intentamos. Del otro lado hay algo así como un sentimiento de orfandad y de odio, por carecer de pasiones .
Saludos!
Gracias por la bienvenida de mi blog a la blogosfera!!!
Tus palabras en este post son emocionantes; llena de imágenes y poesía. En cuanto al porqué que te preguntaste ese día en la fila yo creo que todo se debe al amor. Acabo de hacer un post sobre eso. Más allá de los hechos palpables en la vida de todos, creo que todo queda reducido al amor.
Un saludo grande. Nos leemos!!
Hola Paola
Creo que el fracaso de la antipolítica está íntimamente ligado al recupero de dignidades, así como la construcción del "Nosotros", que en este cambio de paradigma, debería desalojar a ese individualismo mezquino que tanto hemos sufrido. Hay -creo- una dimensión del ir recuperando nuestro lugar como pueblo justamente de la mano de este recupero de dignidad, de orgullo. Quizá todavía sea algo difuso, pero lo veo gestarse desde el Bicentenario. Allí también quedaron fuera quienes bien definís como los odiadores.
Agradezco tu lectura y comenatario, saludos.
Mariquita:
Bienvenida a "Enredando Palabras". Debe celebrarse la llegada de quien viene a compartir con nosotros su pensamiento.
Desde ya, agradezco tu lectura y comentario y, por supuesto, nos estamos leyendo.
Saludos
Vaya si nada será como lo fue. Kirchner deja un escenario político en el cual han sido admitidos nuevamente los planteos, digamos, utópicos, se termina la era de los posibilismos, la resignación y los planteos "racionalizadores" (nótese que digo racionalizadores, no racionales).
El sentimiento de hermandad renace a partir de que Kirchner nos hizo entender que en el despojo fuimos todos iguales: Esto es, todos despojados. Y en tanto se comprendió eso, se revaloriza la política en tanto el instrumento que permitió que todos podamos decir, hoy, que estamos mejor que antes de la llegada de Néstor. No había en la Plaza nadie que tuviera algo que agradecer.
Casi todo lo que decís acá me identifica plenamente y lo he venido volcando en cada intervención que he tenido en la blogósfera desde ocurrido el hecho. El escenario queda re configurado en forma tal que no va a haber lugar para nadie que no sea que venga a ofrecer, ya no más a quitar.
Y en el sentido épico, la movilización para sostener lo que digo arriba, y que vos bien expresaste con aquello de quién habrá de animarse a mover algo de todo lo que brindó Kirchner.
Che Sujeto:
Que pintura.Un post de mixtura exquisita entre idea y acontecimiento definido con sentimiento de calma pasión y descarnado de fanatismo.
Que mas agregar a semejante reflexión y los comentarios,la noticia me dejó estupefacto,y el compartido aire nostálgico de orfandad,del que me repuse enseguida,al recordar que nadie es imprescindible.
Por otro lado comencé a ver la nesecidad de movilización y participación de la gente y sentí alegría que el pueblo abandonara el anquilosamiento,que recomienza el nosotros por encima del yo,que de una buena vez se disipen las tinieblas del analfabetismo político sobre todo en los jóvenes.
Que somos cidadanos y no meros habitantes,del país y del planeta.
Un Abrazo Che Sujeto.
Hola Pablo
Qué acertada palabra empleaste: despojo. Tanto despliegue generoso de políticas que se han venido sucediendo en estos 7 años, y aún queda una enormidad por hacer para restituír el despojo.
Hijos de la injusticia, nos hermanamos en el intento de vencerla, pero porque un tipo como éste nos volvió a hacer creer en que no hay que darse por vencido, ni aún vencido.
Muchas gracias por tu comentario, Un Abrazo
Hola Che Moscón
Veo que te agarré en un día generoso; valoro y agradezco mucho tus palabras.
En verdad, tardé varios días en poder volver a escribir algo que no fuera una expresión de tristeza; creo que todos nos volcamos a decir algo, lo que fuera, una necesidad de comapartir el dolor con aquellos compañeros de ideas, a la vez desconocidos, a la vez entrañablemente amigos. Recuerdo haberte leído, y comentarte que NK nos guía desde arriba, y vos me respondiste: "y desde adentro". Carajo. Cómo me llegó eso.
Creo firmemente que éste es un proceso en marcha, pero un proceso que va a trascender al "kirchnerismo", que va a ir más hacia una mayor consciencia por parte del pueblo de que el único destino posible es el destino en común; como vos decís, que se disipen esas tinieblas del analfabetismo político, y que los jóvenes que tomen la posta en la conducción de esta sociedad sepan evitar los grandes errores que cometimos los mayores.
Te mando un gran abrazo, y una alegría tenerte por acá, Che Moscón.
Muy bueno, compañero. Suscribo tus palabas, Sujeto, suscribo cada comentario. Estamos resignificando nuestra vidas como seres políticos, como sociedad movilizada, como pueblo, abrazo grande.
Tenemos que seguir ese camino de reformar la identidad, para darle un verdadero significado. Además debemos entender que la responsabilidad de ser ciudadano. La calle la tenemos que monopolizar.
Hola Daniel
Muchas gracias por tu comentario.
Te mando un abrazo
Mariano
Así es. Me gustó lo de la "responsabilidad de ser ciudadano", porque es hacerse cargo, en todo sentido: desde con qué criterio elegimos a nuestros gobernantes, lo que les exigimos, y también lo que nosotros debemos dar.
Un Abrazo
Amigo Sujeto:
Disculpemé el offtopi, pero como ando por Buenos Aires se me ocurrió armar una minijuntada bloguera nac&pop, mañana jueves a las 21 hrs.
Creo que Javier, de Fin del Capitalismo, te avisó por mail, pero igual te aviso por acá.
Cualquier cosa, avisame. Te dejo mi mail: loshuevosylasideas@gmail.com
Un abrazo!
Qué disculpas, un placer.
Lamentablemente no voy a poder Ricardo, si no, con gusto.
De todos modos, cópienme a sujetodelahistoria@hotmail.com, que si logro deshacer el compromiso (dificilongo) me pego una vuelta.
Enormes gracias por acordarte
Un Abrazo
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